La senadora gallega Nidia Arévalo ha pedido hoy la dimisión de la ministra de Igualdad, Ana Redondo, en la misma semana del último escándalo de las pulseras antimaltrato, una nueva caída de Cometa, el sistema de protección a las víctimas de violencia de género.
Lo ha hecho esta mañana durante la Comisión de Seguimiento y Evaluación de las Estrategias acordadas por el Senado dentro del Pacto de Estado contra la Violencia de Género, donde la Cámara Alta ha aprobado la moción sobre la protección integral de las víctimas de violencia de género defendida por la representante del PPdeG, aunque sin el apoyo de las senadoras gallegas del PSOE.
Arévalo ha pedido al Gobierno de Sánchez “asumir responsabilidades políticas” y que la ministra, ya reprobada por el Senado y por el Congreso, “se vaya de donde está”, porque “no puede seguir siéndolo con lo que está ocurriendo en este país”.
La moción aprobada demanda al Ejecutivo central “dispositivos seguros, información transparente y control parlamentario” o, lo que es lo mismo, “hacer su trabajo: proteger, informar y rendir cuentas”. En concreto, el Senado insta a sustituir urgentemente los dispositivos defectuosos por unos realmente seguros; a informar de forma transparente y detallada sobre protocolos y decisiones, no a hechos consumados; y a facilitar informes trimestrales en las Cortes.
“Las pulseras han vuelto a fallar y yo me pregunto: ¿Cuántas veces habrán fallado sin que se haya informado? Ahora se informa porque a la ministra se le ha puesto la cara colorada y ya no lo puede tapar, pero lo tapó y lo ocultó durante mucho tiempo”, ha ahondado Arévalo sobre una “herramienta clave” que “se han cargado”.
La portavoz adjunta del Grupo Parlamentario Popular ha señalado que Ana Redondo “lo sabía” y el resto, también ella, ha asistido a esta nueva crisis “en diferido”: “La ministra de Sánchez no sólo ignoró los hechos, sino que los negó; no sólo os minimizó, sino que decidió seguir adelante; no sólo se negó a hacer una auditoría externa, sino que rechazó asumir responsabilidades”.
LAS DIPUTADAS Y SENADORAS GALLEGAS “SIGUEN APLAUDIENDO”
La senadora considera “lamentable” que las senadoras y diputadas socialistas, también las gallegas, “siguen aplaudiendo la negligente gestión de la ministra, haga lo que haga y diga lo que diga”. “Con esa actitud, será difícil llegar a consenso en esta materia”, ha añadido.
“Ustedes son negacionistas porque niegan todo lo que está ocurriendo en materia de violencia de género. Estamos esperando a que dejen de negar lo que está ocurriendo y tomen medidas”, ha continuado Arévalo, interpelando “a la conciencia” de las representantes políticas que son.
En opinión de los populares, “la protección integral de las víctimas no puede ser una promesa vacía ni una consigna partidista, sino que debe nacer de una política pública transparente, eficaz y sometida al control parlamentario”.
En un momento del debate, la también viceportavoz de Igualdad del Grupo Popular se ha dirigido a la bancada de la izquierda y ha señalado que “la bandera feminista y de protección las víctimas no es suya”, preguntándose cómo se pondrían “si fuese el PP el que hubiera cometido estos fallos”.
“No nos vamos a callar nunca. Esta moción nace del escándalo y es una respuesta a su gestión nefasta. No son incidencias puntuales, son recurrentes, y esto es un símbolo del abandono institucional”, ha concluido.


