El responsable de Facenda del Gobierno gallego, Miguel Corgos, reivindica la política económica y tributaria que los gobiernos del PPdeG han aplicado en Galicia y que ha llevado a la Comunidad a ser uno de los territorios más competitivos y atractivos en términos de fiscalidad y atracción de inversores.
Así lo ha puesto de manifiesto hoy, acompañado de sus homólogos de otras comunidades autónomas, en la mesa redonda del acto ‘Hacienda y Fiscalidad’ celebrado en Toledo y que se enmarca dentro de los actos previos a la XXVII Interparlamentaria del Partido Popular.
“Aplicar una política fiscal competitiva no es una posibilidad, es un deber de los gobiernos de cara a la ciudadanía”, manifestó Corgos señalando que el “ejemplo de lo que no se debe hacer” se haya en un Gobierno de España que “nos ha convertido en el tercer país europeo donde más ha subido la presión fiscal desde 2019”.
Haciendo referencia al margen de actuación tributaria que tienen las comunidades autónomas, el conselleiro explicó que Galicia lleva años aplicando rebajas de impuestos compatibles con el respeto a las reglas fiscales, el mantenimiento del equilibrio financiero y la garantía de sostenibilidad de los servicios públicos.
Una política que ejemplificó en las actuaciones que el Gobierno de Alfonso Rueda está llevando a cabo en el ámbito de la vivienda con el objetivo de dinamizar el mercado y favorecer la inclusión de inmuebles que hasta ahora estaban fuera de él “por coyunturas legales desfavorables o por falta de iniciativa”.
Sobre este tema concluyó que “intervenir en el mercado de la vivienda lo único que hace es actuar sobre la oferta, pero a la baja” y que las políticas de vivienda realmente eficaces son aquellas que contribuyen a aumentar la oferta y, con ello, equilibrar los precios.
“TENEMOS QUE SER CAPACES DE QUE NO SE VAYAN LOS INVERSORES”
En materia de competitividad empresarial, Miguel Corgos afeó también al Gobierno central que haya creado “una coyuntura nacional desfavorable para las empresas que expulsa a los inversores del país por el infierno fiscal y la inseguridad jurídica que sufren en su día a día”.
“Las inversiones se están yendo fuera y con ello las oportunidades de negocio de generación de riqueza en el territorio”, denunció contraponiendo este “ambiente contrario al inversor” con las actuaciones del Gobierno gallego para hacer de Galicia un lugar favorable a las empresas.
Puso como ejemplo la Oficina Económica de Galicia, que “trata de acompañar a cualquier empresario que quiera desarrollar su proyecto en nuestra Comunidad para que pueda hacerlo”.