Tres representantes del PPdeG pusieron esta tarde ejemplos, delante de compañeros de toda España, de políticas de termalismo, conciliación o gestión de los residuos que han transformado sus territorios.
En el marco de la XXVII Intermunicipal del Partido Popular en Valladolid, el presidente de la Diputación de Ourense y alcalde de O Pereiro de Aguiar, Luis Menor; la alcaldesa de Mos, Nidia Arévalo; y el alcalde de Vedra, Carlos Martínez Carrillo, participaron en una sesión denominada Elevator Speech, en la que cada uno contó con una breve intervención.
“OURENSE ES LA PROVINCIA TERMAL, DE VALOR TERAPÉUTICO Y SOLIDARIO”
En su turno, Luis Menor destacó los factores que, como provincia termal, diferencian a Ourense del resto de España: sus valores terapéutico y solidario.
“Somos agua”, dijo Luis Menor de la provincia para subrayar el objetivo que se ha marcado la Diputación a la hora de personalizar el potencial termal de la provincia. Una línea de trabajo a la que sumó una particular característica de la población: la ultralongevidad de los habitantes de Ourense, hasta tal punto que en estos momentos se investiga la posibilidad de convertir a la provincia en la sexta Zona Azul del mundo con mayor porcentaje de personas centenarias.
Bajo estas premisas, Menor citó la labor que en materia de bienestar desarrolla la Diputación, como el desarrollo de un completo programa de termalismo para mayores, “con un marcado carácter social y de lucha contra la soledad no deseada”.
Pero, además, y también en su condición de presidente de la Red de Villas Termales de la FEMP, lanzó la propuesta del “termalismo solidario” para las personas mayores que viven y sufren las consecuencias de la DANA de Valencia, ofreciendo un programa de respiro en los balnearios de la provincia de Ourense, propuesta a la que invitó a sumarse a las villas termales y municipios españoles con balnearios.
“HEMOS CONSEGUIDO QUE MOS SEA UN TERRITORIO DE FUTURO”
Por su parte, Nidia Arévalo ha levantado al público presente al son de su “Somos Mos, con alegría y con orgullo”, después de explicar cómo transformar un ayuntamiento “de paso, invisible y abandonado” en “un territorio de oportunidades, futuro, vida y poderío”.
Así, señaló que en 2008 llegó a la alcaldía de un concello “atravesado por los cuatro costados por las infraestructuras de Fomento” y, a partir de ahí, “con inteligencia”, pensó con su equipo cómo sacar lo mejor de esa situación. “Y después de 17 años, lo hemos conseguido: en Mos hay cinco polígonos industriales y trabajan miles de personas de Vigo. De estar amenazados con ser devorados por Vigo, hoy Vigo es la ciudad dormitorio de Mos, donde trabajan los vigueses”, sentenció.
La regidora añadió que la “riqueza” de Mos se basa en que “no hay desempleo” y hay “mucha conciliación”, poniendo como ejemplo las cuatro escuelas infantiles, nueve centros educativos o el único colegio británico de la provincia de Pontevedra. Además, destacó la ciudad deportiva del Real Club Celta de Vigo, el proyecto Galicia Sport 360 del club, y el futuro complejo “pionero” de servicios sociosanitarios de O Rebullón, que incluirá escuela infantil, centro de cuidados intermedios, residencia de mayores y centro de salud.
“NUESTROS VECINOS TIENEN UNA GRAN CONCIENCIA MEDIOAMBIENTAL”
“Ya sabéis, si venís a vivir a Vedra, que seguro que alguno de vosotros vendrá, En Vedra Residuos KM Cero”, concluyó su intervención Carlos Martínez, alcalde y miembro de la Junta de Gobierno de la FEMP, que aprovechó para ahondar en un programa municipal de buenas prácticas relacionado con los biorresiduos.
Martínez Carrillo explicó que Vedra es un ayuntamiento de 5.000 habitantes “limítrofe a Santiago, pero 100% rural”, donde existen más de 130 núcleos de población, ninguno urbano, y más del 95% de las viviendas son unifamiliares”. Por ello, históricamente el municipio ha sido conocido como la “huerta o jardín” de Compostela y el vecindario “tiene una gran conciencia medioambiental”.
A través de En Vedra Residuos KM Cero, el objetivo del Concello es tratar más del 95% de los residuos orgánicos con compostaje in situ, y por tanto sin tener que transportarlos ni recogerlos, con lo que consiguen reducir el volumen de los restos; crear un compost de “excelente calidad” para sus huertas y jardines, eliminando así abonos químicos; contribuir a la mejora del clima; y reducir los costes del servicio. En este momento, el programa está integrado en el 40% de las viviendas y el objetivo es que en 2026 haya llegado al 100%.